El ramo de novia es un elemento icónico que complementa y realza el look de una novia en su día especial. Más allá de ser un simple accesorio floral, el ramo tiene un significado simbólico y estético que puede reflejar la personalidad de la novia, el estilo de la boda y la temática general del evento. Sin embargo, la elección del ramo ideal no siempre es fácil, dado que existen diversos estilos, formas y colores disponibles.
A continuación, exploraremos los diferentes tipos de ramos de novia y los factores esenciales que se deben considerar al elegir el más adecuado para cada novia y ocasión.
La variedad de ramos de novia es amplia, y cada estilo ofrece una estética única. Aquí te presentamos los principales tipos:
También conocido como “ramo en caída”, este tipo de ramo tiene una forma alargada que simula una cascada de flores. Es ideal para bodas formales y elegantes, ya que añade un toque de dramatismo y sofisticación. Se suele elaborar con flores como rosas, orquídeas y lirios, combinadas con follaje que fluye hacia abajo.
Es uno de los estilos más populares y versátiles. Este ramo tiene una forma compacta y simétrica, generalmente compuesto por flores como rosas, peonías o tulipanes. Es perfecto para bodas clásicas y atemporales.
Inspirado en la naturaleza, este ramo tiene un aspecto más relajado y desenfadado. Incluye flores y follajes variados, como margaritas, lavanda, eucalipto y hierbas, que parecen recogidos directamente del campo. Su forma es menos estructurada, lo que lo hace perfecto para bodas al aire libre.
También conocido como "ramo de brazo" o "ramo de presentación", este estilo se sostiene apoyado en el antebrazo, en lugar de llevarlo en las manos. Suele estar compuesto por flores de tallos largos, como calas, lirios o gladiolos.
Este tipo de ramo se caracteriza por su diseño poco convencional, con flores y follajes dispuestos de manera desigual para crear una apariencia artística y única. Es ideal para novias que desean algo diferente y original.
Este ramo, también conocido como "bola floral", consiste en flores dispuestas en forma de esfera y se lleva colgado de una cinta. Es menos común, pero resulta encantador para bodas románticas y originales.
Diseñado con pocas flores o incluso con un solo tipo, este ramo es sencillo y elegante. Puede incluir detalles como follajes verdes o flores singulares, como una cala o un girasol.
Elegir el ramo perfecto no solo depende de su belleza, sino también de otros aspectos importantes que deben considerarse para garantizar que se armonice con el resto de los elementos de la boda.
El ramo debe complementar, no competir, con el diseño del vestido. Por ejemplo, un vestido voluminoso o con muchos detalles bordados puede equilibrarse con un ramo más sencillo, mientras que un vestido minimalista permite ramos más elaborados.
El ramo debe reflejar la temática del evento. Para bodas formales, los ramos en cascada o redondos son ideales, mientras que para bodas bohemias o rústicas, un ramo silvestre es la mejor opción.
La paleta de colores del ramo debe coordinarse con el resto de los detalles, como el vestido, el maquillaje, los accesorios y la decoración. Las novias tradicionales suelen optar por tonos blancos y pastel, mientras que las más atrevidas pueden incorporar colores vivos o contrastantes.
Algunas flores son estacionales, lo que puede influir en su disponibilidad y precio. Optar por flores de temporada no solo es más económico, sino también más sostenible.
El ramo debe ser cómodo de llevar y proporcional al cuerpo de la novia. Un ramo demasiado grande puede resultar incómodo y opacar el look general, mientras que uno muy pequeño podría pasar desapercibido.
El ramo es una extensión de la personalidad de la novia. Si eres romántica, puedes optar por un ramo de rosas; si prefieres lo bohemio, un ramo silvestre será perfecto.
En los últimos años, hemos visto un auge en la creatividad y personalización de los ramos de novia. Algunas tendencias destacadas incluyen:
El ramo de novia es mucho más que un conjunto de flores; es un detalle cargado de simbolismo que puede realzar la belleza y personalidad de la novia. Elegir el ramo ideal implica considerar factores como el estilo del vestido, la temática de la boda y la disponibilidad de las flores. Con una planificación cuidadosa y el asesoramiento adecuado, es posible encontrar el ramo perfecto que haga brillar a la novia en su día especial.